Este miércoles 9 de marzo, tal como estaba pautado, fueron tomadas todas las oficinas regionales del Instituto Venezolano del Seguro Social por parte de trabajadores activos, pensionados y Jubilados en rechazo al aumento del salario mínimo anunciado por el presidente Maduro, el cual consideran inconstitucional, ya que no cumple con el artículo 91 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, que ordena al Gobierno homologar el mínimo y las pensiones de acuerdo al costo de la canasta básica familiar, cuyo monto en enero es de 896 dólares o 4.121 Bs.
Franca Caserta diputada regional señaló para Café 100.9FM y Telesol que no se puede seguir tolerado estos sueldos de hambre. «Estamos exigiendo al gobierno nacional un salario digno. No es posible que sigan muriendo jubilados y pensionados por no tener una buena alimentación».
Por su parte, Rafael Ortiz, presidente de los jubilados y pensionados en el estado Sucre expresó: «Desde el 2018 a la fecha los pensionados y Jubilados han perdido 308 quincenas con aumento, porque en ese momento el Presidente Maduro homologó los salarios y no apareció en Gaceta. Ahora se vuelve a repetir la burla contra los trabajadores».
En la protesta pacífica que se concentró en la plaza Andrés Eloy Blanco, los trabajadores exigieron al Gobierno Nacional reconsiderar este aumento que es insuficientes para cubrir las necesidades básicas de alimentación, medicinas y recreación.