El presidente ruso acusó este miércoles a Estados Unidos de ser responsable de la «crisis ucraniana» por apoyar la revolución de 2014, durante la ceremonia de recepción de cartas credenciales de la nueva embajadora estadounidense en Moscú, Lynne Tracy.
«Las relaciones entre la Federación de Rusia y Estados Unidos, de las que dependen la seguridad y la estabilidad del mundo, atraviesan desgraciadamente una profunda crisis», dijo también Vladimir Putin en la ceremonia, que tuvo lugar en el Kremlin y fue retransmitida por la televisión rusa.
«No puedo evitar decir que el apoyo de Estados Unidos (…) al golpe de Estado en Kiev en 2014 ha conducido, a fin de cuentas, a la actual crisis ucraniana», declaró el presidente ruso, en alusión a la revolución de 2014 que hizo caer al gobierno ucraniano de aquel entonces, que era afín a Moscú.
«Siempre hemos apoyado el establecimiento de relaciones ruso-estadounidenses exclusivamente fundadas en los principios de igualdad, respeto de la soberanía y de los intereses del otro y de no injerencia en los asuntos internos. Nos guiaremos por esto en el futuro», agregó.
Poco después, también sermoneó a la Unión Europea, al aceptar las cartas credenciales del nuevo embajador del bloque, Roland Galhargue.
«La Unión Europea inició la confrontación geopolítica con Rusia», afirmó Putin, constatando que las relaciones con la UE -que apoya firmemente a Ucrania- «se deterioraron notablemente en los últimos años».
Estas declaraciones son una muestra de la crisis diplomática entre Rusia y los países occidentales a raíz del conflicto en Ucrania. Sus relaciones se han degradado a niveles que no se veían desde la Guerra Fría.
La presentación de las cartas de credencial de la nueva embajadora de Estados Unidos se produjo una semana después de que un periodista estadounidense, Evan Gershkovich, fuera arrestado en Rusia, acusado de cargos de «espionaje» -algo que la Casa Blanca rechaza-.
Lynne Tracy, una diplomática rusohablante que ya ha trabajado en Rusia y en otras exrepúblicas soviéticas, fue nombrada en septiembre por el presidente Joe Biden para ocupar el puesto.
Tracy sustituye a John Sullivan, nombrado por el expresidente Donald Trump y que dejó el puesto el pasado verano por razones familiares.
La nueva embajadora hereda unos dosieres especialmente espinosos, incluyendo el conflicto en Ucrania y la situación de los estadounidenses detenidos en Rusia.