El jefe de la Organización Mundial de la Salud, Tedros Adhanom Ghebreyesus, informó el miércoles 17 de agosto, durante una rueda de prensa que alrededor de 15.000 personas en el mundo murieron durante la semana pasada a causa de covid-19, mientras que en las últimas cuatro semanas el número de fallecidos aumentó en un 35%.
«Esto es completamente inaceptable, cuando tenemos todas las herramientas para prevenir infecciones y salvar vidas», enfatizó Ghebreyesus. «Todos estamos cansados de este virus y de la pandemia. Pero el virus no está cansado de nosotros«, agregó.
Además, según el jefe del organismo, ómicron sigue siendo la variante dominante, especificamente, ómicron BA.5, que representa más del 90% de los casos detectados en el último mes.