El presidente francés, Emmanuel Macron, anunció este miércoles la próxima presentación de un proyecto de ley para inscribir «en los próximos meses» el aborto en la Constitución nacional.
El objetivo de la medida es «defender la libertad de las mujeres para disponer de sus cuerpos y de sus vidas», afirmó Macron al realizar el anuncio, durante un homenaje nacional en el Palacio de Justicia a la abogada y diputada Gisèle Halimi.
Esa jurista dedicó su trabajo a la lucha por los derechos de las mujeres y tuvo un importante papel en la legalización del aborto en 1975 y en la calificación de la violación como un delito.
Macron dijo que la inclusión en una reforma constituciónal busca «asegurar de forma solemne que nada podrá obstaculizar ni deshacer» la posibilidad de recurrir al aborto, «para que sea irreversible», y también «para enviar un mensaje universal de solidaridad con todas las mujeres que hoy ven esa libertad pisoteada».
El anuncio fue saludado como una «victoria» por varias organizaciones feministas, como la Fundación de las Mujeres o Planificación Familiar.
La idea de incluir al derecho al aborto en la Constitución comenzó a surgir en Francia después de que el Tribunal Supremo de Estados Unidos eliminó el año pasado al derecho constitucional a la interrupción del embarazo en todo el país.
Las dos cámaras del Parlamento han comenzado a debatir distintos proyectos legislativos, por lo que el anuncio de Macron puede ayudar a definir un texto único. En el Senado, controlado por los conservadores del partido Los Republicanos, la versión del texto señala la «libertad» de recurrir al aborto.
Por ello, varias diputadas y senadoras de izquierda advirtieron que el anuncio de Macron no deja aún totalmente claro si lo que busca garantizar a nivel constitucional es «el derecho» o «la libertad», que para ellas son conceptos diferentes.