En el estadio 974 de Doha, Francia se quedó con un partido muy complicado frente a Dinamarca. Con dos goles de su figura, Kylian Mbappé, superaron 2-1 a los daneses y alcanzaron los octavos de final. Por su parte, su rival deberá ganar obligadamente ante Australia para seguir en competencia.
El desarrollo de la primera mitad tuvo a Francia como dominador, con el control de la pelota y sometiendo a Dinamarca durante los primeros 25 minutos. Sin embargo, los dirigidos por Didier Deschamps en ese lapso solamente pudieron encontrar resquicios a través de la velocidad y el desequilibrio de Mbappé y Ousmane Dembélé.
Paradójicamente, cuando los daneses lograron tener posesiones de mayor duración y merodear tenuemente el área de Hugo Lloris, los galos sacudieron el arco de Kasper Schmeichel con frecuencia.
El aviso inicial llegó a través de un cabezazo de Adrien Rabiot que despejó el arquero; segundos después, otro envío aéreo fue desviado por Raphael Varane y rechazado en el área chica cuando Olivier Giroud se predisponía a marcar el 1-0.
Otro disparo, pero esta vez de Jules Koundé, y una definición de Mbappé por arriba del travesaño agregaron peligro en el área de Dinamarca, que apenas pudo contragolpear con un contraataque de Andreas Cornelius y un desborde del lateral que no encontró destinatario.
Con la tenencia repartida y un trámite de ida y vuelta, fue Francia quien consiguió sacarle mayor provecho antes del descanso, pero sin romper la resistencia de Schmeichel.
En el complemento, la tónica del encuentro continuó de la misma manera, con el campeón vigente como dominador y generando situaciones; mientras que los comandados por Kasper Hjulmand aguardaron alguna oportunidad de contraatacar.
Mbappé hizo un unipersonal que terminó en una definición que exigió la respuesta del arquero rival. Minutos después, Antoine Griezmann hizo una diagonal, recibió de pecho y disparó por encima del travesaño.
Sin embargo, el quiebre sucedió a los 60 minutos. En una ocasión donde Dinamarca había asomado en ataque, Theo Hernández comandó un rápido contragolpe y asistió a Mbappé para el 1-0.
Pero la alegría le duró poco a Francia. Siete minutos después, Andreas Christensen le sacó provecho a un tiro de esquina y de cabeza igualó las acciones 1-1.
El empate revitalizó a Dinamarca, que contó con dos situaciones muy claras. Primero, Lloris atajó una bomba de Mikkel Damsgaard. Luego, Kasper Dolberg desbordó y asistió a Martin Braithwaite, quien definió afuera.
A los 86, Francia volvió a golpear de manera letal: Griezmann sacó un centro preciso al segundo palo para la aparición de Mbappé para el 2-1.
De esta manera, el defensor del título continúa revalidando credenciales como firme aspirante a mantener la corona. Dinamarca, que hasta el momento no ha alcanzado las expectativas de la previa, no tiene margen de error frente a los oceánicos.