Este lunes el canciller de Venezuela, Yván Gil, informó a través de Twitter que el Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas aprobó una resolución que rechaza la imposición de medidas coercitivas unilaterales contra naciones menos desarrolladas.
“Consejo de Derechos Humanos de la ONU aprueba por mayoría una resolución que condena la aplicación y ejecución unilateral y continuada de medidas coercitivas como instrumento de presión contra cualquier país, en particular contra países menos adelantados y países en desarrollo”, anunció Gil.
La votación terminó con 33 votos a favor, 13 en contra y 1 abstención.
“La resolución del Consejo de Derechos Humanos destaca que las medidas coercitivas unilaterales son contrarias al derecho internacional, el derecho internacional humanitario, la Carta y las normas y principios que regulan las relaciones entre los Estados”, señaló el canciller.
Indicó que “la resolución tomada por contundente mayoría manifiesta la preocupación por el impacto negativo que tiene sobre los derechos humanos el cumplimiento generalizado y el exceso en el cumplimiento de las medidas coercitivas unilaterales”.
Añadió que en la resolución se hizo especial énfasis en la repercusión de tales medidas coercitivas en los derechos humanos, afectando “de manera desproporcionada a las personas pobres y en situación de máxima vulnerabilidad”.
También precisó que “ningún Estado puede hacer uso o amenazar con hacer uso de medidas económicas o políticas, con objeto de coaccionar a otro Estado para obtener de él la subordinación del ejercicio de sus derechos soberanos”.
Por tanto, en la resolución se reafirma “que cada Estado tiene plena soberanía sobre la totalidad de su riqueza, sus recursos naturales y su actividad económica y ejerce libremente dicha soberanía, de conformidad con la resolución 1803 de la Asamblea General, aprobada en 1962”, dijo.