Reconocieron a seis cultores y artesanos como tesoros vivos de Mamporal
El ciclo festivo alrededor de la devoción y culto a San Juan Bautista de Mamporal ganó otro reconocimiento porque fue declarado Patrimonio Cultural Inmaterial del municipio Eulalia Buroz, estado Miranda, por parte del Concejo municipal de esa localidad barloventeña.
La propuesta tuvo el respaldo de la Secretaría del Patrimonio Cultural Inmaterial del gobierno regional, la Red de la Diversidad Cultural y Patrimonio Cultural del estado y el alcalde Johan Castro.
El anuncio se realizó en una actividad celebrada en la plaza Bolívar de Mamporal, organizada por la alcaldía y contó con la presencia de los integrantes de la cofradía de San Juan, funcionarios del gobierno local y la población en general que acogieron con alegría este nuevo sitial de honor para la tradición.
Castro dijo sentirse complacido porque Buroz ha sido el único municipio en hacer una declaratoria a esta tradición posterior a la realizada por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) en diciembre de 2021 en París (Francia).
Ratificó su compromiso de continuar con el impulso de las manifestaciones culturales burocenses y procedió al reconocimiento a un grupo de seis cultores y artesanos en diferentes áreas como tesoros vivos de Mamporal. Fueron distinguidos Gavina Nieves, Gregorio Ramón Urbina, Rito Requena, Juan Rafael López, José Inocente Rondón y Raimundo Antonio Reyes.
En esa misma actividad la secretaria del patrimonio Inmaterial de Miranda, Mariam Martínez, y el presidente de la Red de la Diversidad Cultural, Juan Ramón Ojeda, entregaron el proyecto de ordenanza para la Salvaguardia del Patrimonio Cultural Inmaterial, como lo han hecho en otros municipios mirandinos.
El acto cerró con una muestra de Sanjuaneros de Mamporal, una agrupación de movilización y dedicada a la transmisión de saberes.
La fiesta finaliza el 29 en este lugar de Barlovento
En Mamporal solamente existe una parranda que agrupa a todos los devotos del Bautista.
De acuerdo con la tradición el día 23 celebran la Nochebuena de San Juan en la plaza Bolívar. A las 12:00 am comienzan a sonar los tambores culepuya.
El 24 la festividad inicia con una misa en la iglesia Santo Domingo de Guzmán, los feligreses realizan una procesión alrededor de la plaza Bolívar y continúa el toque de los cueros culepuya.
A diferencia de otras localidades el encierro de la imagen del santo se hace el 29, cuando se honra a San Pedro Apóstol y San Juan Bautista. Los portadores de esta tradición y los devotos sacan la figura del templo a mediodía, recorren la población con cantos, expresiones de alegría y el acompañamiento del tambor. Al finalizar la gente retorna al recinto religioso para guardar o encerrar al santo, donde esperará la festividad del año siguiente.
Más fiesta para el santo de la fertilidad
En la parroquia Curiepe de Brion la festividad sanjuanera se prolonga hasta el sábado de la semana siguiente después del 24 de junio porque le toca a San Juan Congo, el santo de los esclavizados y los libertos.
De acuerdo con el presidente de la asociación del Congo y cronista municipal, Adrián Monasterios, las devociones al Bautista y al “Conguito”, como también le dicen, se realizan por separado debido a que este último no es aceptado por la iglesia católica porque tiene un miembro viril en representación de la fertilidad.
Fue realizado en consonancia con las creencias africanas en cuanto a que los dioses tienen la imagen del hombre y no al contrario según el dogma católico.
El sector La Colonia se prepara para la celebración. En horas de la mañana Monasterios y algunos vecinos salen a la zona boscosa buscar ramas para hacer una construcción que proteja la imagen del santo.
El Congo guarda misterios porque no se sabe el nombre del autos, la fecha de la talla ni el lugar de procedencia. Fue llevado a Curiepe a finales del siglo XVII por un esclavizado que logró su libertad, de acuerdo con el escritor e investigador barloventeño Juan Pablo Sojo Rengifo.
Monasterios indicó que bajo la techumbre levantan un altar para el santo, a quien ofrecen flores y frutos de la cosecha. También el toque del culepuya, el baile y los cantos; los participantes llevan golosinas y bebidas para compartir y disfrutar con su Congo hasta muy entrada la noche.
Fuente: Últimas Noticias.
Pasante: Olifrancys Betancourt- UCSAR Cumaná.