Un Municipio modelo
Por Manuel Figueroa Véliz
Venezuela está conformada por 335 municipios distribuidos en 24 entidades federales, que corresponden a 23 Estados y un Distrito Capital. La única entidad federal que carece de municipios son las Dependencias Federales que tienen un territorio insular (Francisco de Miranda) además de la zona en reclamación o Guayana Esequiba, que carece de organización municipal por ser un territorio en disputa. De estos 335 ayuntamientos existen algunos con mayores recursos económicos y naturaleza que otros. Así como hay que por el número poblacional reciben mayor situado constitucional. Pero independientemente de sus situados, son muy pocos los que han podido lograr niveles de calidad óptimos para sus habitantes. Esta minoría tiene gerentes que administran bien lo que entra en sus arcas y por ello hoy están considerados municipios prósperos. Por otro lado, hemos escuchado a burgomaestres afirmar que el dinero sólo les alcanza para pago de nómina, sin embargo, la recaudación de tributos por concepto de impuestos son cuantiosos, dinero que bien pudiera tomarse una parte para mejoras de vialidad, aseo urbano, construcción de escuelas, centros de salud, dragado de ríos y quebradas, entre otros. El Municipio Sucre es uno de las 335 entidades locales que tiene Venezuela, que está ubicado en un lugar estratégico y que cuenta con recursos acuícolas, minerales, pesqueros, agrícolas, importantes empresas y centros comerciales de altísima calidad. Lo que quiere decir, que si hubiese voluntad desde hace mucho tiempo estaríamos dentro del selecto grupo de municipios modelos, porque como dice un eslogan «tenemos con qué». Desde hace un tiempo relativamente corto, un grupo de empresarios cumaneses están apostando y aportando su esfuerzo para que Cumaná tenga un mejor rostro. Casos como Naviarca, Global, la estilista Lorena Ríos, por nombrar los más conocidos, deben ser imitados y apoyados, ellos están dando ejemplo, con su aporte social empresarial, y reafirmando que el desarrollo local es tarea de todos: administración pública, empresarios, trabajadores, comerciantes, sociedad civil organizada y todo aquel que quiera sumarse a la construcción de espacios donde todos podamos vivir quieta y reposadamente; en otras palabras, una localidad de primer nivel, como los hay en Venezuela y en algunos países. No es una utopía. Si todos nos lo proponemos, sin ningún tipo de mezquindades y protagonismos, podemos hacer del territorio donde vivimos un Municipio modelo. Es hora de sacar de nuestras mentes el pesimismo, la negatividad que nos arropa. Debemos visualizar el futuro de esta hermosa tierra con optimismo. Ciertamente, mucho talento humano ha emigrado a otras latitudes, pero no es menos cierto que todavía quedan hombres y mujeres dispuestos a pelear la buena batalla. A diario nos encontramos con personas que están emprendiendo en diferentes áreas, invirtiendo tiempo y dinero porque están convencidas que esta tierra de gracia tiene un potencial extraordinario como no lo tiene otra. El año 2023, debe ser el año definitivo para enrumbar a la Primogénita y sus alrededores por los senderos del progreso y el bienestar colectivo. Ya basta de frases bonitas pero vacías. Llegó la hora del accionar en equipo, dejando a un lado las diferencias y enfocándonos en los puntos de encuentro. Estoy convencido que este es el momento ideal para animarnos y enfocarnos en ese Municipio modelo que todos soñamos.
Enter
Escribe en