Francisco Javier Álvarez Beret, conocido por el nombre artístico de su segundo apellido, se interesó desde niño por la música, desarrollando sus primeras composiciones en los géneros del rap y el reggae. A través de la plataforma de YouTube alcanzó su popularidad, a tal punto que transcendió y firmó con la discográfica Warner Music. Ha sido nominado en los 40 Music Awards y los Grammy Latinos. En la actualidad, es uno de los artistas españoles más escuchados con siete millones de oyentes en Spotify.
Su conexión con el público no solo ha sido por sus canciones y su presencia en el programa La Voz Kids de España en 2021. Confesó que sufría de trastorno de ansiedad; eso logró que las personas que también lo padecen se sintieran identificadas con él, más aún cuando se trata de un artista joven, de 26 años, que ha visibilizado el tema de la salud mental en una sociedad que lo considera tabú.
Luego de su exitoso álbum debut Prisma (2019), donde participaron varios artistas como Melendi, Pablo Alborán y Sebastián Yatra, Beret presenta Resiliencia, producción que le tomó dos años y medio hacer y que lanzó a finales del año pasado. El álbum que habla del desamor, la pérdida de su hermana Sandra y el amor propio, está conformada por catorce canciones en el género de pop urbano y la balada romántica; además incluye colaboraciones con Estopa, Morat, Reik, Malú, Omar Montes y Lérica.
-Las historias de sus canciones son muy cotidianas, cercanas.
-La verdad que no tengo peros a la hora de contar mi vida en mis canciones. Las emociones son universales, de ahí que muchas personas puedan sentirse reflejadas en mis composiciones y que las hagan suyas, eso es lo bonito. Yo vivo para escribir.
-Sin embargo, muchos de sus temas hablan desde el desamor.
-Sí, hay mucho desamor, pero en este nuevo disco hablo de un desamor, muy distinto a mi primer disco, que estaba lleno de romanticismo. Hablo de alejarme de lo tóxico, de empezar a quererme yo antes de querer a alguien. El amor y el desamor son temas tan amplios que muchas veces hablamos de ellos sin haber pasado por lo más básico que es tener autoestima y seguridad en uno mismo. Es sencillo, voy a pasar por mi proceso y después puedo estar contigo.
-Usted nació en un país de grandes cantautores. ¿Qué significa llevar esa herencia y quiénes lo han influido?
-Es un orgullo. En el rap me ha inspirado SFDK, en el reggae Morodo, los cantautores Joaquín Sabina, Jorge Drexler y Andrés Suarez. Toda mi vida he escuchado mucha música. Cuando era pequeño y escribía mis pequeñas frases, era después de haber escuchado alguna de sus canciones.
-Su más reciente álbum tiene un título muy significativo: Resiliencia.
-Bueno, realmente es una resiliencia de volver a ser uno mismo y adaptarse a las circunstancias que nos ponga la vida: la pandemia, que hemos vivido todos, la ansiedad, el fallecimiento de mi hermana y muchas otras que realmente me han hecho tener que escribir. Creo que hay muchos resilientes que sienten pasión por la música, pero que realmente no se ven a ellos mismos, no se ven reflejados; yo escribo canciones con la seguridad de saber que estas personas van a poder ver su vulnerabilidad en estas composiciones y hacer que se sientan mejor.
-Justo tocó el tema de la ansiedad. Para usted, ¿qué tan importante es visibilizarlo?
-En mi posición hablar de ansiedad, depresión y de problemas de salud mental es súper importante porque normalizo, valga la redundancia, lo normal. Existe mucho tabú sobre el tema, me gustaría que aquellas personas que me vean y tengan esa sintomatología, pidan ayuda, y si lo escuchan de mí, por lo menos, yo doy el primer pasito para que hagan algo.
-De esa vulnerabilidad, salió un tema dedicado a su hermana.
-Para mí ha sido un completo desahogo. Compuse el tema el primer día de su ausencia. Si no lo hubiese escrito, seguramente el duelo hubiera sido peor. Espero que la gente pueda personificar en Tata a esos seres queridos que ya no están.
-La tristeza lo inspira.
-La tristeza inspira, pero no hay que buscarla. Es verdad, estamos un poco viciados con lo que componemos, a pasarla un poco mal para poder hacer discos.
-Podríamos decir que para usted la música tiene un propósito.
-Toda la música que te hace sentir es eterna. Quiero conseguir que aquel que me escuche tenga un pequeño refugio, a pesar de que el mundo esté tan loco y que la vida, a veces, sea complicada, que sea capaz de hablar conmigo a través de mis canciones. Tengo la posibilidad y la suerte de hablar en voz alta con mi música y, por lo menos, ayudar a alguien.
-Y finalmente, ¿cómo es la ventana por donde mira Beret?
-En mi ventana quito lo banal para quedarme con el trasfondo. Miro lo positivo, pero de una forma realista y bonita, porque a veces creo que las cosas no son por como sean en sí, sino por cómo se observan.