El hecho de tener en frente al mejor lanzador del Round Robin, como lo fue Ramón García Jr., no le resultó un inconveniente mayor a la toletería de Leones del Caracas para salir adelante y batir 8 a 6 a Tiburones de La Guaira en el primer encuentro de la Gran Final de la Liga Venezolana de Beisbol Profesional, en su edición 2022-2023.
Los bates capitalinos se fajaron para despachar hasta 14 inatrapables, cinco de ellos dobletes, con los que respaldaron otra apertura de calidad del experimentado Jhoulys Chacín, la tercera de manera consecutiva.
“Estaba buscando nada más cinco innings que me diera Jhoulys e hizo tremendo trabajo. Sigue demostrando por qué ha tenido una carrera exitosa en Grandes Ligas. Es un pitcher que ha lanzado Colorado y sabe cómo manejar ciertas situaciones y demostró por qué es el número uno en la rotación”, expresó el manager José Alguacil.
El carácter de Chacín quedó evidenciado una vez más al poder ir largo en el compromiso, a pesar de que confrontó dificultades temprano, cuando en el segundo inning, La Guaira picó adelante con dos anotaciones, una de ellas ilícita.
Con un out, Ángel Reyes le conectó un largo doblete para luego anotar con sencillo de Francisco Arcia, quien aprovechó una pifia del jardinero izquierdo José Rondón para meterse hasta la segunda y desde allí anotar también con inatrapable al centro de Ehire Adrianza.
Con la pizarra dos a cero en la tercera entrada, Leones iba a lograr la paridad después de descifrar los envíos de Ramón García Jr., recién nombrado el Jugador Más Valioso del todos contra todos. El equipo capitalino fue puntual.
Un boleto de Alí Castillo fue seguido por el primer triple de la postemporada para Wilfredo Tovar, al que luego Harold Castro arrastraría hasta la goma con elevado de sacrificio.
García Jr. se recompuso y sacó la entrada, pero distinto a sus actuaciones precias, no pudo ir mucho más allá, porque en la cuarta la ofensiva caraquista volvió a arremeter en su contra, en esta ocasión con un par de tubeyes consecutivos salidos desde la estaca de Oswaldo Arcia e Isaías Tejeda.
Henry Blanco no quiso extender más su participación y le dio ingreso al relevista Carlos Suniaga, quien fue recibido por otra conexión de dos almohadillas, esta del bate del menor de los Arcia, Orlando.
