El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, prometió que «habrá consecuencias» para las relaciones de su Administración con Arabia Saudita, luego de que la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP+) anunciara la semana pasada que reduciría su objetivo de producción de crudo, pese a la oposición de Occidente.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, examina una respuesta a Riad, luego de que la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP+), que incluye a Moscú, anunciara la decisión de reducir la producción de crudo.
“Va a haber algunas consecuencias por lo que han hecho con Rusia”, advirtió Biden en una entrevista el martes 11 de octubre.
Un pronunciamiento que demuestra el abandono de los recientes intentos de EE. UU. de buscar un acercamiento con el príncipe heredero Mohammed bin Salman y arroja dudas sobre el futuro de la relación de seguridad entre Estados Unidos y Arabia Saudita.
Aunque el Gobierno estadounidense no ha revelado las opciones que tiene sobre la mesa, el influyente senador demócrata, Bob Menéndez, presidente del Comité de Relaciones Exteriores del Senado, sostuvo que su país debe congelar de inmediato toda cooperación con Riad, incluida la venta de armas.
Menéndez acusó al monarca saudita de ayudar a “financiar la guerra de Putin a través de la OPEP+. “Simplemente no hay espacio para jugar en ambos lados de este conflicto (…) No daré luz verde a ninguna cooperación con Riad hasta que el reino reevalúe su posición con respecto a la guerra en Ucrania. Ya es suficiente”, remarcó.
Por su parte, la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre, aseguró que se realizaría una revisión de la política con su tradicional aliado «durante las próximas semanas y meses».
La medida anunciada representa un nuevo desafío para la Administración de Joe Biden de cara a las elecciones de medio término del próximo 8 de noviembre.
En medio de los altos costos de la energía y la inflación tras las sanciones a Moscú y sus respectivas consecuencias económicas para el mundo, este asunto podría inclinar la balanza entre el electorado en los cruciales comicios que renuevan parte del Congreso de EE. UU.
Riad apunta a mantenerse en su decisión. El ministro de Relaciones Exteriores saudita, el príncipe Faisal bin Farhan, señaló que la decisión de la OPEP fue estrictamente económica y fue tomada por unanimidad por los Estados que la integran.
“Los miembros de la OPEP+ actuaron de manera responsable y tomaron la decisión adecuada”, aseveró el príncipe Faisal al canal de televisión Al Arabiya.
Pero Washington insiste en señalar que Arabia Saudita se doblega así ante Rusia, tras oponerse al tope en el precio del petróleo ruso que pide Occidente en respuesta a la invasión de Ucrania.
La medida de la OPEP+ y sus aliados propina un duro golpe a Estados Unidos, al socavar sus intentos por reducir los ingresos rusos y amenaza con un aumento en los precios de la gasolina semanas a pocas semanas de las elecciones legislativas.