La normalización de las relaciones entre Colombia y Venezuela ya permitió que llegue a Barranquilla un cargamento con 16.000 toneladas de fertilizantes venezolanos a un precio menor al del mercado internacional. El acuerdo fue gestionado por el embajador colombiano en Caracas, Armando Benedetti.
Las relaciones entre Colombia y Venezuela no paran de estrecharse, tras un cambio de dirección en la política exterior colombiana luego de la asunción del presidente Gustavo Petro.
Luego de décadas de liderazgo de corte conservador en Colombia y una historia marcada por momentos de acuerdos, así como de conflictos en la frontera, los Gobiernos encaminan cada vez más, la restauración de sus relaciones binacionales.
A la designación de sus embajadores se suma el restablecimiento de las relaciones militares, la apertura de las fronteras y el retorno de las relaciones comerciales entre ambos países, un respiro para ambas economías, golpeadas, entre otras cosas, por la falta de fertilizantes.
En ese marco, el viernes 23 de septiembre arribó al muelle de la empresa petroquímica Monómeros en el puerto colombiano de Barranquilla el primer cargamento de fertilizantes proveniente de Venezuela.
El embajador de Colombia ante Venezuela, Armando Benedetti, confirmó que el Gobierno colombiano adquirió más de 16.000 toneladas de urea a un precio de 600 dólares la tonelada, un precio accesible en comparación con el del mercado internacional, donde la tonelada oscila entre 730 y 930 dólares.
«Es una gran noticia para los campesinos, porque se ahorrarán 100 dólares por tonelada», expresó Benedetti a través de su cuenta de Twitter.
Colombia ve con buenos ojos el intercambio, que brinda soluciones en medio del alza de los precios de los alimentos. En efecto, el país alcanzó en agosto una inflación anual de 10,84%, según datos del Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE).
De acuerdo a cifras oficiales reportadas por el organismo, los precios de los alimentos y las bebidas no alcohólicas llegaron a superar incluso los valores del promedio total nacional, alcanzando 25,57% de alza anual.
Los altos precios de los alimentos se agravan ante la escasez de fertilizantes generada como consecuencia del conflicto en Ucrania y las sanciones impuestas por Occidente a Rusia, uno de los principales exportadores de urea compuesto químico requerido para la actividad agrícola.
Este intercambio se suma a una serie de negociaciones que mantiene el Gobierno de Petro con la administración de Maduro sobre la devolución de la petroquímica Monómeros, compañía que según Caracas fue usurpada por el exdiputado Juan Guaidó en complicidad con el expresidente Iván Duque.
La firma, que proporciona el 35% de los fertilizantes a Colombia, volvió a estar bajo la dirección de la estatal venezolana Pequiven este 21 de septiembre, fecha en que se designó a la nueva Junta Directiva de Monómeros y a su gerente general, la ingeniera Ninoska La Concha, ante la presencia de delegados de ambos países.
La devolución incluyó acuerdos entre los gobiernos que involucran que las ganancias de Monómeros se quedarán en Colombia para ser reinvertidas en la economía local.
