Cataloga de exabrupto la medida económica aprobada en la Asamblea Nacional.
Comerciantes que hacen vida económica en la capital bolívarense rechazan de manera contundente la medida aprobada por el Parlamento Nacional, esta se refiere a una reforma a la Ley de Impuesto a las Grandes Transacciones Financieras (IGTF), que permitirá al Ejecutivo incrementar hasta 20% los impuestos por operaciones con divisas.
La respuesta de la mayoría casi al unísono fue la misma: «no estoy de acuerdo».
Una de las encuestada fue Maribel Cabrera, propietaria de un abasto, ubicado a poco cuadras del mercado Periférico, quien manifestó estar en desacuerdo con la medida. Considera que la población no ve reflejado en ninguna parte el resultado de la recaudación de los impuestos ya existentes.
“Pagamos todos los impuestos que por ley debemos pagar, estamos al día con eso, pero de qué sirve (…) ni siquiera se tiene el beneficio de una atención de calidad en el sistema de salud público. Te digo con propiedad que un familiar estuvo dos semanas en el hospital y tuve que llevar absolutamente todos los suministros médicos (…) un nuevo impuesto encarece más los bienes que tú puedas adquirir”, expresó Cabrera.
Otros consultado fue Noel Duque es un comerciante de origen portugués que llegó a Venezuela y ya tiene más de 30 años de trabajando en el paseo Orinoco, específicamente en la calle Venezuela. Es propietario de una zapatería. Pues cataloga de exabrupto la medida económica aprobada en la Asamblea Nacional.
“Si eso se empieza a aplicar realmente, va a empeorar los entuertos que tenemos en el ámbito económico del país. Estamos hasta el tope de impuestos del Sarem, de la Alcaldía de Ciudad Bolívar, del aseo urbano y de tantos otros (…) eso traerá más contracción de la economía, para los tiempos que estamos viviendo, ese tipo de impuestos es totalmente absurdo”, opinó Duque.
El dueño de una panadería en la avenida República, Johan Vieira, rechaza que se pretenda aplicar la reforma sobre la ley del Igtf, porque la medida no solo afectará a quienes realicen grandes transacciones comerciales, sino que impactará duramente en el bolsillo de los pequeños y medianos comerciantes y en el de la población en general.
“Yo creo que esa medida significará un retraso total, y aparte de eso puede generar mucha evasión fiscal y operaciones hechas fuera del comercio, al margen de la ley. A nosotros nos toca pagar 2% por el pago de salarios que les hacemos a nuestros empleados. Quisiera que alguien me explicara qué gran transacción financiera representa eso para que tengamos que pagar 2% por la nómina de unos pocos trabajadores”, apuntó el comerciante.